La noble tarea que hace una enfermera es digna de alabar: Director de Ciencias de la Salud

Autoridades de la Universidad Autónoma de Tlaxcala (UAT) presidieron la graduación,  en el Teatro Universitario, de 163 egresados de la generación 2008-2012 de la Licenciatura en Enfermería que se imparte en la Facultad de Ciencias de la Salud.

En representación del Rector, Dr. Víctor Job Paredes Cuahquentzi, y del padrino de generación, Dr. Serafín Ortiz Ortiz,  el Mtro. Rubén Reyes Córdova, Coordinador de la División de Ciencias Biológicas, habló del significado del código internacional de enfermería: “Es el que rige a las enfermeras y tiene que ver con respetar y cuidar a la vida  así como a  los derechos humanos, manteniendo una conducta honesta y leal en la atención de las personas, otorgando cuidados de enfermería libres de riesgo”.

A su vez, el Dr. Constantito Vicente Quiroz Pérez, Director de la Facultad de Ciencias de la Salud, expresó la importancia que tiene esta graduación al ver cristalizados los esfuerzos de sus estudiantes, quienes culminan una serie de aspiraciones, sueños y anhelos, al convertirse en los nuevos egresados de esta licenciatura.

Asimismo,  recalcó la noble tarea que realiza una enfermera en una institución de salud: “La labor de una enfermera es digna de  alabar y  de reconocer pero, sobre todo, de agradecer porque siempre está al lado de nuestros enfermos, escuchándoles, tolerándoles, auxiliándoles y muchas veces ayudándolos a nacer o a morir”.

Finalmente, invitó a los graduados a no olvidarse de su Universidad, porque “no solo llevan la firma en un diploma, en un certificado o en un título, hoy creo que van a tatuar  su alma porque esta Institución les permitió lograr el titulo de licenciados en Enfermería, por eso a la Universidad que nos dio esa gran oportunidad se le ama, respeta, defiende, apoya y se es  solidario con ella. Egresan de una universidad con una carrera acreditada a nivel de cualquiera de las mejores universidades en México”.

Enseguida, Saraí Damaris Tlapalamatl Hernández, representante de los egresados y estudiante reconocida por su aprovechamiento académico, dedicó unas palabras a los presentes y consideró que cada fracaso es una lección de vida que nos engrandece y cada triunfo es un eslabón para el camino hacia el éxito.

Posteriormente, docentes decanas de la Facultad de Ciencias de la Salud encabezaron la ceremonia del paso de la luz, ritual que significa el origen de la profesionalización de la carrera, como un legado de la enfermera inglesa Florence Nightingale, quien es considerada la pionera de la enfermería moderna.

Se cuenta que Florence Nightingale utilizaba una lámpara mientras atendía a los heridos en combate durante la guerra de Crimea, por lo que también se interpretaba como la transmisión de conocimientos de una enfermera experimentada a las nuevas egresadas, una luz de guía  a los que sufren de dolor y desesperanza o un reconocimiento para aquellas mujeres que han logrado transcender por su vocación de altruismo.

Para finalizar el evento de graduación, los egresados enunciaron el juramento de la enfermera: “Juro solemnemente ante Dios y en presencia de esta asamblea llevar una vida digna y ejercer mi profesión honradamente, me abstendré de todo cuanto sea nocivo o dañino, y no tomaré ni suministraré cualquier substancia o producto que sea perjudicial para la salud. Haré todo lo que esté a mi alcance para elevar el nivel de la enfermería y

Comparte el boletín